lunes, 7 de octubre de 2013

"El reto de la nube"



UN RETO POR HACER




Hilo, espaguetis, celo, tijeras y una nube son los personajes principales de este juego en el que debemos construir una torre con los materiales lo más alta posible, y cuando esta esté terminada colocar con suavidad la nube encima de ésta. 

Un jueves nos avisan de que al día siguiente no debemos traer las últimas tres asignaturas, ninguno sabemos el por qué pero obviamente no nos resistimos. Entonces cuando llega el día nos juntan por grupos y nos llevan a la primera planta, todos podíamos observar los materiales que se encontraban encima de los pupitres, pero ninguno de los allí presentes sabíamos muy bien que estaba pasando, no obstante nos sentamos en el suelo y entonces una de las profesoras comienza a explicarnos el juego, no se entendía muy bien lo que decía pero con varias palabras sueltas que se escuchaba podíamos entender que en 18 minutos teníamos que hacer una torre lo más alta posible y colocar encima la nube, cuando la música pare empezarían a calificar. 
La música se puso en marcha y mi equipo y yo comenzamos primero a planear como haríamos la base, primero pensamos en un cuadrado pero más tarde pensamos en que sería mejor un triángulo, y así fue como empezamos. Cuando transcurrieron diez minutos a penas teníamos algo hecho, pero el tiempo pasaba y en el último minuto sin pensarlo dos veces mi compañera cogió la nube y con ningún tipo de suavidad la pinchó en los tres espaguetis que había en forma de pirámide, pero nuestra torre era demasiado pequeña...tan solo 25 centímetros de altura por lo que ni siquiera se molestaron en medirla, si hubiese consistido en la resistencia de la torre probablemente habríamos ganado...
Más tarde subimos cada uno a nuestra clase y nos ponen un vídeo sobre la prueba que habíamos hecho que, por lo visto la prueba de la nube consistía en medir nuestra capacidad de organización.
Sin duda alguna fue un reto bastante divertido y emocionante ya que mediante grupos teníamos que hacer una torre, lo malo es que  cada persona tenía una idea diferente para hacerla es por ello que hay que respetar el turno de palabra. Aunque en mi grupo cada uno decía una idea en voz alta sin esperar nada, pero aun así la torre aunque pequeña nos salió bastante resistente como para tenerla en la mano.

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